Autor del artículo Alejandro Fuente
para El Comercio
Las obras de rehabilitación del pozo
Santa Bárbara, en Turón, «marchan a muy buen ritmo», informó ayer el arquitecto
responsable a pie de obra. José Ramón Fernández Molina hizo un recorrido por
diversos puntos de la antigua explotación minera, donde planteó cuestiones de
futuro, de cuando finalice la recuperación del entorno, prevista para este
verano. Junto a él se encontraban miembros de la asociación cultural minera de
Mieres que lleva el mismo nombre que la mina. Las partes están determinando,
entre otros asuntos, el punto ideal de acceso de los futuros visitantes a los
elementos de este patrimonio industrial. Y lo tienen bastante claro: tanto
arquitecto como la entidad quieren conectar el pozo con el socavón de La
Rebaldana -que se encuentra a unos doscientos metros de distancia- aprovechando
la existencia de un antiguo puente de hierro y el hueco que en su día ocupó el
trazado del tren carbonero.
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Será un trabajo que «enriquecerá
todo lo que estamos encontrando en la rehabilitación del pozo», señalaba
Molina. Y es que los voluntarios de la asociación Santa Bárbara tienen previsto
iniciar hoy las labores para recuperar esa senda. Desde la agrupación se
detalló que lo primero que se quiere hacer es retirar toda la maleza para,
posteriormente, nivelar y acondicionar la antigua plataforma del tren y
conectarla con las instalaciones del pozo a través del citado puente de hierro.
La intención, explicaban, es que «algún día» pueda albergar una ruta en tren.
De momento, se quiere convertir en senda peatonal para que los visitantes
«entiendan la minería de montaña y en vertical en su conjunto». El arquitecto
quiso destacar el compromiso y la aportación de la asociación Santa Bárbara
para ampliar los trabajos de recuperación del pozo turonés. Las obras centrales
-ejecutadas ya al 70%- cuentan con un presupuesto superior a los 660.000 euros
aportados por Cultura.
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