El 16 de septiembre de 2011 se cumple el 150 aniversario de la inauguración de la línea férrea de Zaragoza a Barcelona con la llegada del tren oficial a la primitiva estación de Arrabal. En este siglo y medio el tejido ferroviario que surca la ciudad de Zaragoza ha cambiado enormemente, primero con las sucesivas ampliaciones y, más tarde, con las transformaciones hasta llegar a convertir la ciudad en un nudo importante dentro de la red de alta velocidad.
El Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Aragón y La Rioja celebra esta fecha con una serie de actos relacionados con el ferrocarril en Aragón: Conferencias, presentación del libro 150 años del ferrocarril en Zaragoza, de luis Lezáun, emisión de un sello conmemorativo y material filatélico relacionado con el aniversario, visitas técnicas y una exposición de material ferroviario.
Programa del COIIAR en pdf, aquí
Noticia sobre los actos del aniversario
Ingenieros Industriales celebrarán los 150 años del ferrocarril
El Colegio de Ingenieros Industriales de Zaragoza celebrará el próximo mes de septiembre el 150 aniversario de la inauguración de la línea férrea de la capital aragonesa a Barcelona.
En coincidencia con la llegada del tren oficial a la primitiva estación de Arrabal, se presentará en la sede del colegio el libro "150 años de ferrocarril en Zaragoza", del ingeniero Industrial Luis Lezaún Martínez de Ubago, catedrático de Ingeniería Mecánica en la Universidad zaragozana, informan fuentes de la institución colegial en una nota de prensa.
En el número que se publicará este mes de julio, la revista "Ingenieros Industriales" incluye un artículo del autor del libro en el que, como primicia, se aportan curiosidades de la citada efeméride.
En su artículo, Luis Lezáun asegura que el ferrocarril "tardó más de lo previsto en alcanzar nuestra ciudad, cuyo número de orden en la lista cronológica de capitales de provincia con tren es el diecinueve".
Lezáun señala que a partir de 1863 ya se podía ir de Madrid a Barcelona, pasando por Zaragoza, "en algo más de 24 horas de tren", un tiempo que "supuso un acortamiento tremendo con respecto a las 80 horas que eran necesarias en diligencia".
Según la investigación del catedrático, los trenes procedentes de Madrid y Pamplona estuvieron llegando hasta 1895 a una estación provisional que estaba situada en el lugar donde actualmente se está construyendo el edificio CaixaForum.
Apunta además que Zaragoza ha tenido diez estaciones ferroviarias en lo que hoy es la ciudad consolidada: las de Arrabal y Campo Sepulcro, la de Cariñena, la de Utrillas, la de Delicias, la del Portillo, la Intermodal de Delicias, la de clasificación de La Almozara, el apeadero de la Química y la estación de Miraflores.
El Arrabal conmemorará la inauguración de la estación
Los vecinos del Arrabal celebrarán del 25 al 30 de septiembre el 150 aniversario de la llegada del ferrocarril a Zaragoza, ya que fue aquí, en la Estación del Norte, situada en la calle Perdiguera y reconvertida en centro cívico, donde llegó el primer tren de todo Aragón. Para el barrio, el antiguo apeadero tuvo una importancia vital, ya que con la llegada del ferrocarril se revitalizaron la azucarera y las empresas de alrededor, que recibían las mercancías a través de este transporte.
Los actos incluirán un encuentro de maquetistas para abrir la semana o un ciclo de cine ferroviario en el que se proyectará entre otras, El maquinista de la general para la cual contarán incluso con un pianista en directo, como antiguamente se hacía durante la emisión de películas mudas. También se incluirán películas de directores aragoneses como José Antonio Páramo.
La exposición de fotografías cedidas por los propios vecinos será uno de los eventos centrales. Se mantendrá abierta al público desde el 26 de septiembre, fecha exacta de la llegada del ferrocarril, hasta el 16 de octubre, y muchas de las fotografías serán inéditas. "Ha sido un ejemplo de participación ciudadana. La involucración de los vecinos ha sido tanta que hemos tenido que elegir de entre todas, solo 75 fotografías de trenes, la estación y la ciudad como era en aquel entonces", afirmó Rafael Tejedor, presidente de la asociación de vecinos Tío Jorge Arrabal.
También habrá conferencias sobre la estación y el barrio, conciertos y homenajes a quienes trabajaron en la estación hasta su cierre.
Aunque de momento "es solo una idea", a los vecinos les gustaría ver la Estación del Norte reabierta por las facilidades que supondría "tener a 150 metros los trenes de cercanías", explicó Tejedor. No existe todavía un proyecto como tal, pero desde el Arrabal ya tienen todo pensado: "Tal y como está la fisonomía del barrio, la estación tendría que ser subterránea. Sabemos que sería muy costoso pero tenemos pensado hasta el tipo de línea y los servicios. Se podría incluso ir hasta Huesca y construir un intercambiador a la altura del Royo Villanova". Desde la asociación de vecinos esperan que las actividades de septiembre sirvan, además de para conmemorar el aniversario, para dar a conocer y promover esta iniciativa.
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