El molino de Rihonor reabre sus puertas como oficina
de turismo.
Artículo de La Opinión de Zamora
El edificio del molino de Rihonor de Castilla abre sus puertas al turismo
en el doble sentido, como ejemplo de arquitectura popular comunitaria y como
nueva oficina de Turismo. El convenio entre el Ayuntamiento de Pedralba de la
Pradería y la Diputación provincial ha permitido que este punto fronterizo
cuente desde esta semana con una oficina para facilitar información a los
visitantes.
Ximena Acuña, vecina del mismo pueblo y contratada para atender al
público, ultimaba ayer –su segundo día de trabajo- el orden y la decoración del
pequeño local. Pequeño pero inmensamente llamativo por conservar el engranaje
molinero. Unas colmenas de corcho antiguo y algunas herramientas antiguas
completarán el primer golpe visual de los visitantes. La mayor parte de la
información estará disponible a través de códigos QR. La familia de Ximena se
afincó hace cinco años en el pueblo, donde tiene una pequeña explotación
apícola.
La integración cultural y social entre los dos barrios, el portugués y el
español, es total. Reconoce que entiende el portugués pero no lo habla, y siempre
queda el recurso del portuñol. Como vecina ha tenido contacto con el turismo
que pasa a uno y otro lado y que “van muy perdidos”. Así se piensa que el río
marca la frontera y no. La frontera no es paralela al curso del río, sino
transversal. A los visitantes les llama mucho la atención que “en el mismo
paseo crucen de un país a otro y todo sin salir del casco urbano”.
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Esta madre de familia de origen chileno, casada con un zamorano, llevaba
8 años sin trabajar y ahora tiene una oportunidad de trabajo en la propia aldea
en que reside. Ha participado en teatro en su país natal y ha pertenecido a un
grupo de Zamora. A la espera de recibir todos los soportes informativos,
incluido el cartel indicador de la oficina de turismo, ordena el espacio y
coloca el dispensador de gel y mascarillas obligatorias en todo espacio
público. Los elementos y el nombre de cada uno de los engranajes del molino son
también una fuente de información.
Desde la oficina española se estará en contacto con el museo etnográfico
abierto en Rio de Onor, el lado portugués, y que se complementarán además de
intercambiar información para visitar uno u otro lado de la raya. De momento
las primeras visitas al molino son de los propios vecinos del pueblo,
expectantes por la reapertura del molino. El edificio sufrió hace casi dos
décadas la embestida de una fuerte riada que lo dejó en el suelo, para
posteriormente ser reconstruido. Los hijos de Ximena aprovechan, mientras, el
canal por donde entraba el agua que movía el mecanismo hidráulico para jugar.
Fuente de la noticia https://www.laopiniondezamora.es
2019. Rihonor destina el molino a Oficina de Turismo
de referencia hispanolusa.
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