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viernes, 28 de mayo de 2021

La Encartada recupera y pone en funcionamiento sus máquinas. Balmaseda (Vizcaya)

 

Encartada Fabrika Museoa pone en marcha el programa de recuperación mecánica y funcional de su patrimonio tecnológico

Artículo de El Diario

 

La Diputación de Bizkaia ha puesto en marcha un programa de recuperación mecánica y funcional de La Encartada Fabrika Museoa. Se trata de un proyecto que tiene como objeto recuperar y poner en funcionamiento las máquinas de la fábrica e incluso llegar a producir en el futuro alguna prenda.

 

Según ha destacado la entidad foral, para ello se pondrá en funcionamiento "la valiosa maquinaria de una antigua factoría y recobrar la funcionalidad productiva, orientado siempre a la recuperación, conservación y difusión del patrimonio, en este caso, industrial".

 

La diputada de Euskera, Cultura y Deporte, Lorea Bilbao, ha valorado que "sólo en Bizkaia es posible visitar una fábrica centenaria que conserve -en el mismo emplazamiento y en buenas condiciones- la misma dotación tecnológica completa con la que se constituyó la empresa".

 

"Ahora hemos dado un paso más, hemos comenzado el proceso de recuperación de su puesta en funcionamiento. Una recuperación que ya ha dado sus primeros frutos con la puesta en funcionamiento de cinco de las aproximadamente 16 máquinas que completan la cadena de producción de la fábrica", ha añadido.


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La diputada ha explicado que la idea es "ver las máquinas en funcionamiento, trabajando y produciendo con las mismas técnicas que se utilizaban mientras la fábrica estuvo en funcionamiento".

 

"Ambas cuestiones, el qué y el cómo, son igualmente importantes. No se trata de un legado cualquiera, sino de uno que cobra especial relevancia si lo comparamos con testimonios similares del patrimonio industrial europeo: en este ranking La Encartada Fabrika-Museoa es un conjunto excepcional e incluso único en opinión de los expertos", ha insistido.

 

De este modo, el proceso de recuperación y puesta a punto de la maquinaria se está realizando con técnicas de reparación utilizadas mientras la fábrica estuvo en funcionamiento, lo que aporta "mayor valor a todo este proceso". Así se ha reintegrado recientemente el cojinete sobre el que reposa el eje principal de la maquinaria

 

En la mañana de este lunes se han mostrado en funcionamiento cinco máquinas conectadas en serie, sucesivas y en carga: el batán pequeño (mazo), batanes de prendas pequeñas, la centrifugadora, la dinamo Edison y la máquina conocida como 'Diablo'. Ésta es la primera máquina del proceso productivo, responsable de picar y desmenuzar el vellón de lana ya lavado, y la única de esta antigüedad (1892) que puede verse en activo en Europa.

 

VISITAS

Con el objetivo de que la ciudadanía pueda conocer el proceso de recuperación de la maquinaria, el museo ha propuesto la iniciativa 'ven, lo ves y te lo explicamos'.

 

Las personas visitantes podrán conocer así y ver directamente cómo desarrolla su tarea el restaurador y pasará a formar parte de la exhibición permanente que ofrece el museo. Esta nueva programación empezará a ofertarse a partir de junio y será imprescindible reservar plaza previamente por teléfono o por correo electrónico.

Fuente de la noticia https://www.eldiario.es/

 

Las máquinas centenarias, a pleno rendimiento en La Encartada.

Artículo de Elixane Castresana y Borja Guerrero para Deia

 

SE la temía por su peligrosidad, de ahí e l sobrenombre de Diablo, que ponía en guardia a los trabajadores de Boinas La Encartada cada vez que se encendía el batuar procedente de Inglaterra que data de 1892, año de apertura de esta fábrica textil de Balmaseda. No queda otra pieza de este modelo y antigüedad en el continente. Suponía el primer paso de la cadena de producción: desmenuzar el vellón de lana ya lavado. Ayer lunes volvió a escucharse a pleno rendimiento por primera vez desde que las instalaciones cerraron en 1992 para dar paso al museo que puede visitarse actualmente.

 

Elevado a la categoría de punto de referencia por la Asociación Europea de Patrimonio Industrial, da un nuevo paso con la recuperación de 16 máquinas de finales del siglo XIX y principios del XX que abren la puerta a reproducir la cadena productiva. Seis de ellas ya pueden activarse, como se mostrará en recorridos guiados que comenzarán en junio con la participación del restaurador que las ha dotado de una segunda vida con las herramientas de antaño. A largo plazo, la Diputación, que gestiona el museo, no descarta elaborar alguna prenda.


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"Trabajamos permanentemente con la idea de un museo vivo", señaló la diputada de Euskera, Cultura y Deporte, Lorea Bilbao, que resaltó las cualidades que hacen de La Encartada un conjunto de valor excepcional: "Su antigüedad y sincronía, la integridad del proceso de producción y el estado de conservación" son testimonio de las primeras etapas de la revolución industrial. Hasta el momento se han volcado en una labor de "mantenimiento, pero queremos revivir la fábrica", manifestó Asier Madarieta, en representación de Bizkaikoa, la entidad que aglutina a los museos de responsabilidad foral.

 

El programa de actuación se puso en marcha en febrero, "con un diagnóstico de las necesidades y las primeras reparaciones", detalló María José Torrecilla, técnica del museo. En esta primera fase se han centrado en la centrifugadora, el batán pequeño, batanes de prendas pequeñas, la dinamo Edison y el mencionado batuar.

 

Aunque antes debieron salvar el dificultoso arreglo del cojinete "del que parte todo el eje principal de la maquinaria". Probablemente original de 1892, "estaba entre la pared y había tenido muy poco mantenimiento", contó el restaurador, Joaquín Marco Sáenz de Orbijana, que lleva veinte años colaborando con La Encartada. Como resultado, "se ha ido desgarrando el material" y para solucionarlo "hemos realizado una intervención que no se veía desde hace sesenta años, en colaboración con trabajadores de Altos Hornos que han aportado sus conocimientos. "Hombres de hierro", llama María José Torrecilla a Tomás Ariza, Juan María Zulueta y Mikel Martínez, que orientaron sobre cómo rellenar el material que faltaba en el cojinete "para que la pieza original resista con mejores prestaciones". Una intervención relevante por su conexión con el resto de la instalación.

 

"Estuvimos a punto de abandonar", confiesa la técnico, ahora que el éxito de la actuación abre las puertas a volver a confeccionar boinas o bufandas e integrar el proceso en los itinerarios previstos para sábados alternos con reserva previa, en los que participarán también el propio restaurador y personas expertas en las diferentes técnicas de elaboración textil.

*Esta noticia cuenta con video

Fuente de la noticia https://www.deia.eus

 

VIDEO EN YOUTUBE sobre el programa de recuperación


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