Me han informado sobre este nuevo caso de Patrimonio Industrial en peligro, esta vez en Denia (Alicante), una antigua serrería de 1903 que podría ser derribada y también de un edificio de viviendas que albergaba un horno de pan en su planta baja (conocido como El Penal). José Manuel Gabriel me ha informado de esta noticia y me ha facilitado las fotografías que muestro a continuación, desde aquí agradecerle que me informara sobre todo esto.
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| Serrería Doménech |
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| El Penal |
NOTICIA SOBRE ESTOS POSIBLES DERRIBOS
Dénia: Dos edificios centenarios
a la venta y en plena degradación en apenas 50 metros de la calle Diana.
Artículo de La Marina Plaza
Diana es una de las calles más emblemáticas de Dénia. Empezando por su
nombre, que alude a la divinidad a la que en teoría debe su nombre la ciudad,
continuando por su peso comercial y concluyendo por una estética magnífica, un
guiño al visitante con esa doble visión de la muralla sur del Castillo a un
lado y el Montgó al otro; y sin embargo es también un paisaje con muescas: dos
edificios prácticamente centenarios que llevan años cerrados y degradados, y
cuyo futuro es incierto. Ambos están a la venta. Se trata de la serrería
Doménech y de El Penal. Los dos encierran además pedazos de la historia de la
población del primer tercio del siglo XX.
Pasado industrial con fecha de caducidad
Salvo sorpresa de última hora, la serrería desaparecerá. Ya en un libro
editado en una fecha tan lejana como 2000, La mirada de l'Arxiu, Rosa Seser, la
jefa del Arxiu Municipal de Dénia, advertía de que estaba condenado al óbito
debido a que se encuentra fuera de ordenación respecto a la alineación de la
calle Diana. Bien es verdad que en catálogos de bienes patrimoniales
posteriores como el de 2004 llegó a protegerse de forma integral como exponente
de arqueología industrial, pero fuentes municipales señalaron que en el nuevo
catálogo que tramita el gobierno local de PSPV y Compromís no tiene ninguna
figura de preservación con el fin de lograr esa alineación tanto con la calle
Diana como en la de la Vía, adonde da la parte trasera de la antigua fábrica.
La serrería cobró especial prosperidad durante la dictadura de Primo de
Ribera y en los años iniciales de la II República. Según Seser, en 1923 se
constituyó la Sociedad Anónima Juan Bautista Doménech con un capital social más
que notable para la época de un millón de pesetas. La mercantil se dedicaba a
la «compra y exportación de frutos, serrería mecánica y maderas en general».
Daba empleo a 71 obreros con un salario de 5,5 pesetas por una jornada laboral
de 8 horas. Todo un ejemplo de la boyante burguesía local de la época y de sus
relaciones laborales.
Imagen de la noticia
La muerte de Juan Bautista Doménech en 1929 desencadenó la liquidación del
negocio, que un antiguo empleado, José Gualde Martí, primero alquiló en 1933 y
después adquirió en los años cuarenta. Gualde se dedicaba a comprar madera en
Galicia y el Norte de Europa que en las naves de la calle Diana se convertían
en tablas y envases para su venta.
Más tarde el edificio se fue fraccionando en diversos negocios: la nave
central se dedicó a almacén de adobos y
taller mecánico y un lateral a taller de motonáutica. A partir de la década de
los setenta hubo en la fachada un gran cartel de Citroen cuya estética fue
cambiando con el paso de los años. Ahora lo sustituye el cartel de la
inmobiliaria que anuncia su venta. No obstante y pese a su degradación, todavía
puede distinguirse con nitidez en la estructura el carácter industrial y fabril
del inmueble; y en el remate de la entrada principal puede leerse la palabra
Doménech.
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Fuente de la noticia https://lamarinaplaza.com
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