Desarmaron y vendieron como chatarra un molino histórico de Bella Vista.
Artículo de Florencia Bonavento para Clarin
Un día el molino desapareció. Lo desguazaron, lo vendieron como chatarra y
se llevaron parte de la historia de los primeros pobladores de Bella Vista y
todo el municipio de San Miguel.
No importó que llevaba casi 120 años en ese lugar, que estaba protegido, ni
el compromiso de no quitarlo. Simplemente lo sacaron sin previo aviso y ahora
el Municipio está intentando recuperarlo.
“No sólo es importante recuperar el molino sino su ubicación, porque allí
está la historia. En ese lugar estaba la casa principal del fundador de Bella
Vista y San Miguel, Adolfo Sourdeaux. Eran principios del 1900 y ésta era una
quinta grande de 38 hectáreas, la más grande de la zona”, contó Carlos O'Brien,
fundador del Archivo Histórico del Partido de San Miguel.
La quinta “El Retiro” de Sourdeaux fue cambiando de dueños y dividiéndose a
lo largo de su historia con nuevos loteos. En el camino, perdió edificios que
formaron parte de la historia de San Miguel y sólo quedaba el molino sobre la
Calle Paraná, entre Catriel y Maestra Munzón.
"Cuando el fundador vivía aquí, hasta 1875, ni siquiera existían estos
molinos. En realidad, fue construido entre el 1900 y 1910, cuando los
propietarios eran la familia Moine. Es un Molino Agar-Cross original que
todavía funcionaba y hasta hace pocos años atrás suministraba agua a las casas
en construcción. Fue de los primeros en llegar al país", explicó O'Brien.
La familia que instaló allí el molino tiene también una importancia
histórica para San Miguel ya que Patricio Moine fue el primer presidente de una
asociación vecinal, plantó árboles, delimitó calles y estableció la “Fiesta del
Árbol”. De hecho, en uno de esos festejos se plantaron los tan representativos
plátanos de la Avenida Francia.
En el casco central de la quinta "El Retiro", donde estaba el
molino, vivieron también años después los descendientes de Carlos Saavedra
Lamas, el diplomático y político argentino, que fue el primer latinoamericano
galardonado con el Premio Nobel de la Paz.
Hace dos años ya habían intentado desarmarlo porque, como se encuentra en
un terreno privado, en una subdivisión quedaba en medio de uno de los terrenos.
En esa ocasión, un grupo de vecinos se enteró y logró que se paralizaran
las obras allí gracias a que el Municipio lo declaró Patrimonio Municipal y
hubo un compromiso oficial por parte del desarrollador privado de mantener el
molino. Esto figuraba incluso en la escritura de la propiedad.
Esta protección impedía´{ia modificaciones parciales, totales o su
desarmado. Pero a pesar de esto, hace 15 días y sin previo aviso, lo
desguazaron en pocas horas y lo retiraron de su lugar original.
Como se incumplió lo acordado, el Municipio inspeccionó, labró un acta y
actualmente la Justicia de Faltas es quien debe intervenir en el asunto.
Fuente de la noticia https://www.clarin.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario