La chimenea de la Central Térmica caerá el jueves de lado, «como si fuese un árbol que está siendo talado»
Artículo de Camila Ortiz para La Comarca
Andorra vive estos días la cuenta atrás antes de ver
caer la chimenea de su Central Térmica el próximo jueves 16 de febrero, un
acontecimiento que supondrá el final de toda una época. Después de una
detonación en su base, la estructura caerá de lado, «como si fuese un árbol que
está siendo talado», y no hacia abajo, tal y como ocurrió hace 9 meses con la
voladura de sus tres torres de refrigeración. Todo ello bajo un amplio
dispositivo de seguridad en el que se guardará una distancia de al menos 800
metros para evitar accidentes indeseados.
Al tratarse de un único elemento, este será detonado a
través de un proceso «mucho más concentrado» que el anterior. Se seguirán estas
condiciones debido a la dificultad que supone derribar una chimenea de tales
dimensiones, con 343 metros de altura y 28 de diámetro. Es la tercera
estructura más alta de toda España, llegando incluso a superar en altura a
otras conocidas alrededor de todo el mundo como lo es la Torre Eiffel de París,
que alcanza los 300 metros.
Los trabajadores se encuentran ultimando estos días
los detalles previos. Todavía se desconoce la cantidad de explosivos que se van
a emplear, aunque sí se adelanta el gran dispositivo de seguridad que, igual
que en el anterior derribo, se prevé desplegar para que únicamente pueda
acceder a la zona el personal autorizado. Además, durante los días previos
también se comunicará a los vecinos de las fincas adyacentes todos los detalles
para evitar cualquier tipo de peligro.
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El fin de una época
La Térmica de Andorra fue la primera Central en toda
España que vio caer sus tres torres de manera simultánea. Tras un largo trabajo
preparatorio de más de dos meses, su detonación se llevó a cabo con 270 kilos
de explosivos que lograron una imagen única: la de las tres torres, de 107
metros de alto y 83 de diámetro, cayendo hasta quedar reducidas a escombros.
Cada una de ellas tenía un peso de 12.577 toneladas.
El acontecimiento supuso un paso más en el desmontaje
de una infraestructura icónica para Andorra, el Bajo Aragón y toda la provincia
de Teruel que ha estado operativa durante cuatro décadas, en las que se produjo
224.000 GWh, equivalentes al consumo de electricidad peninsular durante un año.
Ahora, el próximo jueves, a ello se unirá el derribo
de una chimenea que comenzó a construirse en 1978 y cuya obra no terminó hasta
1981. Su composición consta de hormigón y de materiales especiales que soportan
altas temperaturas y su demolición será la escenificación más clara del fin de
toda una época. El adiós del carbón, un sector que atrajo población, creó mucha
riqueza y al que se ha dado cerrojazo sin que todavía se manifieste una
verdadera transición justa para la cuenca minera turolense.
Malestar ante el derribo
El procedimiento se prevé llevar a cabo en un panorama
social que respira «gran malestar» ante el derribo. Han sido múltiples las
peticiones realizadas tanto desde el plano político como a pie de calle para
mantener la chimenea en pie como Bien Industrial al tratarse de «un emblema
para la localidad y la provincia de Teruel». Aunque todas han sido descartadas
por Endesa al costar su mantenimiento «varios millones de euros».
Fuente de la noticia https://www.lacomarca.net/
Los
ingenieros de Caminos cuestionan que se tire la chimenea de Andorra
Artículo de El Periódico de Aragón
La junta rectora de la demarcación de Aragón del
Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos ha cuestionado que se haya
optado por la demolición completa de la térmica de carbón de Andorra, que cesó
su operación a mediados de 2020 debido al proceso de transformación energética.
El desmantelamiento de este complejo marcará un hito el próximo jueves, con la
voladura de la chimenea, la tercera infraestructura más alta de España con 343
metros.
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En una carta, esta entidad profesional considera que la demolición se está llevando a cabo «con gran celeridad», pues empezó con sus tres torres de refrigeración en forma de hiperboloide de más de 100 metros de altura esta pasada primavera, «transformando una infraestructura industrial emblemática, de gran valor ingenieril, en 37.000 toneladas de escombros».
Fuente de la noticia https://www.elperiodicodearagon.com
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