A
continuación os transcribo un breve resumen realizado por José Luis Lalana Soto
del artículo “El depósito de locomotoras, una posible joya mundial de
patrimonio en riesgo” que a continuación comparto.
Con
la llegada de la electrificación ferroviaria, a mediados de la década de 1960,
se cerró al servicio el Depósito de locomotoras de vapor de la estación de
Valladolid, después de un siglo de actividad. Las necesidades de funcionamiento
de las nuevas locomotoras eran muy diferentes a las del vapor, y por criterios
técnicos y de localización geográfica no se consideró necesario remodelar esta
instalación, que quedó en una especie de limbo, suspendida en el tiempo, en un
proceso de deterioro lento pero inexorable.
Cincuenta
años después de su cierre, y a pesar de que ya desde hace tiempo venimos
planteando su enorme valor patrimonial, tanto por sus características propias
(antigüedad, tipología, autenticidad, integridad), como por su
representatividad como un tipo de establecimiento común en cualquier
explotación ferroviaria del mundo, o su valor documental (legibilidad de los
procesos de evolución del mundo industrial y de la arquitectura)… amenaza
ruina.
Su
localización en un área central de la ciudad, dentro de un espacio ferroviario
todavía funcional, pero sobre el que planean desde hace tiempo diversos
proyectos urbanísticos de gran escala, no ayuda. Tampoco la sensibilidad
general de agentes sociales e instituciones ha sido especialmente receptiva
ante el patrimonio industrial, y menos respecto a un conjunto edificado que no
se ve y es difícil de entender, a pesar de que durante más de 100 años, hasta
la llegada de FASA-Renault, la mayor industria vallisoletana fueron los
talleres ferroviarios, y de una vinculación histórica evidente (material y
simbólica) de la ciudad con la industria del transporte.
De
ahí que el hecho de que las instituciones municipales y la ciudadanía empiecen
a tomar conciencia de su patrimonio, reivindicando su preservación y
visibilización, como muestra el que se publiquen reportajes como éste, sea una
cuestión de extraordinaria importancia, sobre todo en un contexto como el de
Valladolid, donde el patrimonio industrial, del cual el Depósito de locomotoras
es sólo una parte, es todavía una asignatura pendiente.
El
depósito de locomotoras, una posible joya mundial de patrimonio en riesgo.
Valladolid.
Artículo
de Antonio G. Encinas para el Norte de Castilla.
Fuente
de artículo https://www.elnortedecastilla.es/
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